El pronóstico asociado a la pericarditis aguda puede ser muy variable yendo desde una enfermedad leve hasta poder convertirse en una enfermedad mortal. Si se diagnostica de inmediato el pronóstico es frecuentemente positivo. La gran mayoría de las pericarditis tanto virales como idiopáticas son curadas mientras que una pequeña parte, aproximadamente 2 de cada 10 presentan recidivas incluso pasados los 3 meses del primer brote.
Cuando la pericarditis recurrente presenta varias recidivas a lo largo de los años, puede seguir evolucionando hasta convertirse en una pericarditis crónica.
Cuando una pericarditis se agrava, con frecuencia produce cicatrización y engrosamiento de la cubierta del miocardio llegando a causar problemas a largo plazo similares a los de una insuficiencia cardíaca, esto se denomina pericarditis restrictiva.
No hay comentarios:
Publicar un comentario